miércoles, 14 de enero de 2009

MOMA: TEATRO INFANTIL Y ARTE CONTEMPORANEO



Varios personajes contemplan el cuadro “State of mind” de Mark Rothko.

UNA PERIODISTA.- ¿Cuánto ha tardado en pintarlo, Sr. Tosco?

SR. TOSCO.- Dos horas, pero he trabajado años para poder hacerlo en dos horas.

OTRO PERIODISTA.- ¿Sr. Tosco, podría explicar su cuadro?

SR. TOSCO.- (molesto) Ya estamos, lo importante es el diálogo entre el cuadro y usted.

UNA PERIODISTA.- Ah! A ver (lo mira) No entiendo nada de lo que me dice.

UN DECORADOR.- Qué mono, quedaría fenomenal en mi salón.

SR. TOSCO.-¡Aaah! El arte no es decoración, no es decoración. ¡¡¡Es una aventura!!!

UNA ALUMNA.- Me encanta, parece que he entrando en un sueño.

SR. TOSCO.- Es mi alumna. Una espectadora sensible.

UN CRÍTICO DE ARTE.- ¡Qué pena, con lo bello que era lo de antes!

SR. TOSCO.- Odio a todos los críticos de arte. ¡Menuda panda de parásitos!

LA MARCHANTE.- ¡Hay poca luz, Tosco y queda muy triste. Así no se vende nada.

SR. TOSCO.- Ni hablar, tiene que haber un ambiente misterioso.

UN BANQUERO.- Así nunca se va a forrar.

SR. TOSCO.- ¡Soy un romántico!

UN MATRIMONIO.- ¡Uy, pero si esto lo hace nuestro niño! (ríen burlonamente)

SR. TOSCO.- Me duelen los comentarios que sólo dejan ver pereza mental.


Un fragmento de: “MOMA”. Una obra de teatro infantil sobre arte contemporáneo, que la compañía Factoría Teatro esta representando los fines de semana de enero, en el Teatro Infanta Isabel de Madrid.

Si ustedes son de los que piensan que los niños no son gilipollas no se la pierdan, disfrutaran tanto o más sus hijos.

PD1: Los audiovisuales son estupendos (los he realizado yo).

PD2: Compren sus entradas en: atrápalo.com les saldrán más baratas.

lunes, 12 de enero de 2009

EL NACIONALISMO DE ESPERANZA AGUIRRE


El nacionalismo en política es un negocio seguro. La gran mayoría ama la tierra en la nació, los paisajes conocidos, las calles de la infancia, las fiestas que vivió de niño o de joven, su idioma materno, en resumen su hogar. Si las ideas de un partido político prometen defender todo eso, tienen un montón de votantes asegurados.

Si a estas ideas le sumas una bandera y un enemigo externo, el éxito es casi seguro. Especialmente en España, donde todo el mundo cree que el chorizo de su pueblo es el mejor.

Hasta hace poco había una comunidad autónoma donde el nacionalismo parecía imposible: Madrid. En la capital vivimos gente de todas partes de España (y del mundo) y una de las mayores virtudes de la capital es uno de sus tópicos, que acepta a todo el mundo sin importar de donde venga.

Pero una empresaria de la política como Esperanza Aguirre no podía dejar pasar un negocio como el nacionalismo. En Madrid no puede reivindicar una bandera, ni una tradición, ni un idioma, pero le queda una de las bazas más importantes de cualquier nacionalista: el enemigo externo.

Desde que gobierna Esperanza Aguirre el culpable de cualquier problema en la Comunidad de Madrid es el gobierno de España. Siempre, sin excepción. Los problemas de seguridad, económicos, de educación, de sanidad… hasta si nieva, la culpa la tiene el Gobierno central. Si no me creen vean un informativo de Telemadrid y juzguen ustedes mismos.

Y saben lo mejor, que ese argumento tan simple funciona.
El nacionalismo es un gran negocio.

viernes, 2 de enero de 2009

Sobremesas navideñas



Hoy estoy contento por que la navidad ha terminado. No me gusta la navidad. Nunca he llevado bien que me digan cuando tengo que estar contento o cuando triste.

A pesar de esto hay una cosa que me gusta de las navidades: las sobremesas con mis padres. Cada año me entero de historias nuevas que no conocía de mi familia. Historias que me ocultaron, que no se molestaron en contarme, o que yo no quería escuchar.

Con estas historias entiendes mucho mejor por que te educaron de determinada manera, por que tu familia, y tu, tiene determinadas costumbres, y el origen de muchas de las situaciones que de niño no entendías.

En resumen que aprendes bastante sobre tu familia, y eso implica aprender bastante sobre ti mismo.